sábado, 3 de abril de 2010

32 Forrest St. Narrogin WA AustraLia.






New home.

Desperté en mi primera mañana en mi nueva cama, con mi nuevo ropero, mi sillón retro y mi ventana que amorosamente me muestra cada alborada un cielo celeste rojizo, con nubes blancas. Un sol que quiere salir pero lucha con una noche que en vano intenta quedarse… son las cinco de la mañana, salto de la cama y tropiezo con un vaso… no tengo velador aún, pronto lo tendré!. Es helada como toda casa en la madrugada… a tientas busco el interruptor de luz, (aún no memorizo bien los lugares), salgo y atravieso un largo pasillo que me lleva al baño. La casa por dentro es blanca, muy iluminada, con un suelo de madera vitrificado, como antiguo, pero muy bonito. Mi living room retro, con sillones de cuero blanco y cojines rojizos… un plasma y un par de guitarras. La cocina es nueva, amplia y moderna (es bastante grande), contrasta con el piso vitrificado, color café rojizo, que me recuerda una casa de campo, abrigadora, con un refrigerador antiguo que más bien es ochentero, pero bien a mi onda.

Tenemos 3 habitaciones, una para Russel, otra para mi (que son de exacto tamaño), y una tercera que será para estudio, porque Russel trabaja con computadores y tecnologías que implican espacio… así que por mí no hay problema.

Tengo un jardín amplio, con rosas que alguien plantó y nunca más quiso, pero yo las quiero y ya tengo lista mi idea de cómo arreglar mi jardín.

Encontrar la casa fue un reto bastante complicado, una casa que nos gustara a ambos, Russel gusta de lo sesentero, un poco pegado con lo hippie, a mi me gusta lo setentero/ochentero, más retro, pegada con eso… pero ambos queremos estilo, así que ha sido fácil. La cuestión es compartir, el cocina muy bien, yo me encargo de limpiar y mantener ordenado… porque es nuestra casa, hay que cuidarla.

Los amigos han traído regalos, ya tenemos un lindo juego de patio, con 6 sillas y una mesa que permite un almuerzo o una cena en un pronto bonito jardín. (no tengo jardín aún, pero ya tengo podadora). Nos regalaron platos, vasos, cosas para cocina. En una venta de garaje encontramos un sillón de cuero reclinable, en buen estado, de color café botella (que buen ejemplo el color, tengo ahora a mi lado una botella de cerveza “hahn super dry” de color café) grande para una persona, que costó la módica suma de 15 dólares. Lo barato porque tiene rota una manilla y si eres muy regodeón puede doler la mano “un poco” pero a nosotros nos da lo mismo… un refrigerador, microondas, escritorio y silla por 50 dólares. Fuera de una cama regalada de dos plazas, y el juego del living que fue un regalo también.

Esta semana ha sido ajetreada, compras, arreglos, pintura… pero feliz, feliz porque todos los días desde hace una semana puedo decir, “come to my place”, o, cuando alguien pregunta “what up to?, yo respondo… “at my place mate!”.

Nuestros vecinos vinieron hace unos días a presentarse, gente amable, gente de edad, gente que nos ofreció ayuda para cualquier cosa. Gente buena. Acá no necesitas dejar las puertas con llaves, el auto cerrado, miedo de que alguien entre y tome tus cosas. Eso no sucede acá, acá te vas por el día al trabajo, dejas todo abierto y cuando vuelves todo sigue igual, nadie entra sin preguntar, nadie invade tu espacio, la policía vendrá el lunes a las 1:00 pm, nos dejaron un papelito, porque tienen registro de nuevos residentes, lo que significa que vendrán a conocernos y dejarnos un adhesivo para el refrigerador en caso de emergencia. Este pueblo de Narrogin tiene cuatro mil habitantes, creo conocer tres mil quinientos, la mayoría son personas de edad que van al bar a conversar con chiquillas jóvenes y pasar un rato agradable, si caminas por la calle, más de alguien te dirá “Good Day”, pero de la buena manera… “Good Day Mate!”, si no respondes es porque eres un idiota, yo aprendí acá que el colón irritable no existe… porque todos esperan, todos tienen buena voluntad, si cometes un error, es mejor porque aprendes de una buena vez… si te caes en la calle, más de alguien irá a recogerte, es tan lindo todo acá. El otro día compré un sistema de sonido pulento, deje pagado 100 dólares adelantados… y el señor de la tienda me preguntó si quería comprobante, pregunté ¿lo necesito? Y el me dijo, No Andy, cualquier cosa te llamo… ok, nos vemos Scott. Es así, todos te conocen, todos te cuidan.

Pensaba en comprar un perro… tener mascota acá es cosa sería… tienes que registrarlo, al registrarlo tienes que adquirir el kit para perros, que significa un chip y un collar especial con los datos del dueño. Pensaba en que eso no es tan complicado, sino que, paso el mayor tiempo fuera de la casa, russ trabaja también, así que, tener un perrito no es tan buena idea, es dejarlo solo y sin

Pienso en las cosas que encontré acá y las que no encontraré y solo me falta mi familia, mis amigos y el infaltable fin de semana playero con el cooler y sus respectivas cervezas, los sanguchitos preparados por alguna amiga/o buena onda… y así, pensando que soy feliz pero siempre extraño lo que me regaló la vida… gente que no encontraré en ninguna parte porque todos son diferentes e importantes.